viernes, 14 de septiembre de 2018

Ilustración. de "El lugar hallado" del libro: Años y leguas de Gabriel Miró, por Palmeral

Ilustración a lápiz del capitulo 13.- "El lugar hallado" del libro: Años y leguas de Gabriel Miró, por Palmeral



Sellos de Correos personalizado

Ilustración a Lápiz, "Años y leguas".- 12 Camino y lugares.- Por Palmeral



 Subida a Tárbena

Ilustración a Lápiz, "Años y leguas".- 12 Camino y lugares.- Por Palmeral

Obra de nuestro Gabriel Miró

septiembre 2018

lunes, 10 de septiembre de 2018

Primeros dibujos de Ramón Palmeral cuando tenía 13 ó 14 años





capítulo19.1.- "Los bravos roders. "Años y leguas" de Gabriel Mirón, ilustrado a lápiz por Palmeral

Ilutración inédita de Palmeral

Años y leguas, de gabriel Miró.
Los bravos roders.

El asesinato de viejo partor Linasa, por el roder Destralet de Evo,  porque se iba a cajar con una mujer más joven y entera.



"Todas las tardes viene al pueblo Llinasa, un viejo pastor. El rebujal es suyo, y en aquellos años bien valdría nueve mil reales. Es viudo, con tres hijos carboneros. Siempre se para el viejo en la fuente para ver a la hija del menescal lavar y llenar los cántaros, una moza morena que se le estremecen las carnes rotundas cuando vuelve ella la faz mojada y colorada y mira galopa halconeando al viejo. Cuando se marcha la mujer, baja el pastor y bebe donde ella sumergió los brazos de color de cebada. Pronto dicen por el pueblo que se casarán. Entonces los hijos, los tres carboneros, buscan al Destralet y le piden: -«Pregúntale al abuelo si se quiere casar; y si es de verdad, dale un susto».
A mediodía el pastor pasa con su ganado en busca de las carrascas; y arriba, en el filo de la cumbre, se le aparece el Destralet y le llama: -«Abuelo: ¿es verdad que se casa?»-. El pastor se queda mirándole. En el silencio y sol de la sierra, el grito de ese hombre le da inmensidad y rabia a su gozo. Se calla para guardarse toda la promesa de mujer joven. Las cabras se van parando, rodeándole, y levantan los ojos blancos y la cuerna hacia el Destralet... -«¿Y es de veras lo del casamiento? ¿Mujer nueva y entera para un abuelo?»-. Y el pastor le dice: -«¡Y a tú qué te importa!». -«¿Pero es de verdad?». -«Pues de verdad es; ¡y a tú qué te importa!» -Y se desgarra un tiro; tiemblan las esquilas; y el pastor cae con los brazos abiertos en medio del ganado inmóvil..."


sábado, 8 de septiembre de 2018

Ilustración del capi. 9.- Sábado de luna de "Años y leguas" de Gabriel Miró, por Palmeral




 Ilustración de Palmeral sept.2018

Comentario para el libro: "Buscando a Gabriel Miró en Años y leguas".

La luna llena aparece por el mar llenándolo de plata, al este por la sierra de Bernia, que antes era «un galeón volcado» ahora es «un órgano de plata entrevisto por una vidriera infinita, translúcida de luna», por al otro lado aparece Calpe, lo más hermoso de la costa, y a su lado el [Peñon de ] Ifach, «tallado de luna…El barco se ahogaba en la belleza y ha tenido que gritar». Y Miró en un estado hipnótico de alto poeta escribe: «…y al derretirse el último acorde encima del ascua blanca de la luna, el barco se ha perdido para siempre centro de la noche suya; y el paisaje y el mar han venido a desceñirse». 
     El gallo le cant´ño a la luan en cima del lomo del burro.
    El alarde poético de la luna llena convertido en un indiscutible perito en lunas lirico, es para justiciar que la luna llena entró por el ventanuco de la cuadra, hasta dentro del portal, donde burro, que había herido en el cuello amoroso a la cordera de una dentellada, Miró, como en la mejores fábulas le da voz al burro para que se defienda de los gritos y amenazas de Gregorio, su amo: 

  
  ­–«¡He sido yo; se lo hice yo, anoche! –habla el burro– Fue sin querer, amo mío. Entró la luna, y nos pusimos a jugar la Paloma y yo. Yo estaba tan contento que retozaba creyéndome un cordero novio. Mis quijadas se hundían en su cuello tierno como una hierba. La Paloma se quejaba y yo venga de morderle y de pasarle mi lengua caliente como una mano. ¡Mis orejas parecían dos ramas de ciruelo en flor! ¡Yo no me acordaba de lo que era, porque yo estaba, amo mío, yo estaba también muy jovencito y guapo de luna!».

      En la fábula de Miró la vampiresa es una cordera llamada Paloma, y en el de Juan Ramón Jiménez es una cabra (79.- Alegría):  

    «La cabra va al lado de Platero, rozándose a sus patas, tirando con los dientes de la punta de las espadañas de la carga.
     Con una clavellina o con una margarita en la boca –la cabra–, se pone frente a él, le topa en el testuz, y brinca luego, y bala alegremente, mimosa igual que una mujer...»

        Esta apreciación  no quiere decir que Miró hay copiado a Juan Ramón sino que se inspirara, puesto que ambos escritores tenían amistad epistolar iniciada en 1919 como lo demuestra el Epistolario de 2009. En carta de 21 de octubre de 1919, le pidió un ejemplar de Platero y yo, porque dice que el ejemplar suyo lo prestó y se perdió.
        La cuestión es que tenemos ante nosotros una gran fábula digna del mejor Miró.

Sellos de Correos personalizado


jueves, 6 de septiembre de 2018

Años y leguas, capitulo "8.-Benidorm. Un extranjero. Callosa". Ilustración de Palmeral










 Cuando  Gabriel  Miró  se desplaza a una estación, sin más, que seguidamente nos explica que es de un ferrocarril. Esta línea era el ferrocarril entre Alicante y Altea que se inauguró el 28 de octubre de 1914 y entre Altea y Denia, el 11 de julio de 1915,  de la Compañía de los Ferrocarriles Estratégicos y Secundarios de Alicante (E.S.A.), hoy de los Ferrocariles de la Generalitat Valencianos (FEVE) desde 1986, y después de más de cien años continúa en funcionamiento, debidos a la proliferación del turismo de la Costa Blanca.
      Cuando describe: «Y este tren de tartanas atadas con cadenas flojas, que cuelan y retumban como un obrador ambulante de alderería;…» lo dice Miró en tono irónico, ya que El Trenet tenía seis años y todos los vagones eran nuevos. Para la tracción de los trenes se adquirieron en 1913 y 1914 diez locomotoras tipo 130 T de la factoría alemana Hanomag. Cuatro fueron construidas en Alemania y seis en España por La Maquinista Terrestre y Marítima.  Locomotoras de vapor 240-4054 (ex MZA 1304) construida por Hanomag en 1914 tenía una potencia 2.050 cv. y una velocidad máxima 105 Km/h. El tren tenía asientos de varias clases, y en tercera iban tantos los agricultores como pescadores con sus mercancías, no solo de Benidorm sino desde toda la Marina, lo que propicio un gran desarrollo económico a la zona del interior

    El rey Alfonso XIII colocó la primera piedra de la línea ferroviaria Alicante-Dénia del tramo Villajollosa-Denia, el 13 de febrero de 1911. Estaba acompañado por el presidente del Consejo de Ministros, José Canalejas, el ministro de Marina, el capitán general de la Región Militar de Valencia, así como de los diputados y senadores por la provincia de Alicante, y el Arzobispo de Valencia oficio un Te-Deum.

miércoles, 5 de septiembre de 2018

Ilustración del "Huerto de cruces" de "Años y leguas" de Gabriel Miró por Palmeral


Ilutracion a 320 píxeles

Huerto de cruces, ganó el Premio Cavia de periodismo ABC en 1925, dotado con 5.000 pesetas (20.000 reales)

Ilusrtración a lápiz por el ilustrador Palmeral

ramon.palmeral@gmail.com

Leer "Huerto de cruces" en la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes

lunes, 3 de septiembre de 2018

"Años y leguas". 6.- El señor vicario y Manihuel. Gabriel Miró. Dibujos de Palmerall







ilustración a lápiz:
"Años y leguas". 6.- El señor vicario y Manihuel. Gabriel Miró. Dibujos de Palmeral




   La parte simpática y quijotesca cervantina de este relato (6.- el señor viario y Manihuel)  se remata con el suceso de que el viario se monta  en el macho (del mulo del mozo que había venido a buscarlo) con su viático en las manos, escribe el narrador «¡Llevaba a Dios en las manos!», por ello no se pudo poner el solideo en la cabeza (este es un casquete que se ponen las jerarquías eclesiásticas como obispos, cardenales o el Papa, pero no lo sacerdotes), por ello en el relato el solideo lo llevaba el vicario en la faltriquera (bolsa pequeña que se ata a la cintura y se lleva colgando bajo la falda o el delantal), y va con la cabeza destocado. Delante del vicario montado en el mulo ya el mozo, hijo del moribundo, llevando en la mano izquierda la campanilla, y en la otra el ronzal o cabestro del mulo, a modo de guía.