PALMERAL Y SU INTELECTUALISMO
Cuando alguien se planta ante un
cuadro con la intención de observarlo, es éste el que, con la magia que
el pintor ha proporcionado, le atrae, le arrastra a su interior, a vivir
dentro de su escena o saborear los rasgos de los protagonistas
encuadrados en el lienzo.
En el caso de esta colección de pinturas
que Ramón Palmeral denomina “Intelectualismo”, el proceso que surge
ante el espectador es muy otro; las formas de vida que en los cuadros
aparecen, tanto vida humana como vida de
la materia que cobra aliento y vive, no espera a que el observador
llegue con la mirada a sentir el ánimo que expresan sus trazos, no; son
las mismas imágenes las que dan un salto de sus cuadriláteras moradas
para ir en busca del espectador e invadir sus emociones con el lenguaje
transgresor de las contraposiciones del color, de las arriesgadas formas
que se deforman para adquirir nueva forma y renacer de nuevo a la vida
en una distinta realidad.
Las figuras humanas de esta nueva
dimensión emiten sentimientos a través de los rasgos de sus caras o de
los gestos de su cuerpo que, aunándose en perfecta simbiosis con la
atmósfera de cariz onírico, muestran en lenguaje pictórico el cúmulo de
realidades que el tamiz de Ramón Palmeral canaliza, entremezcla y
sintetiza para ofrecerlo transformado en arte. No son imágenes
plasmadas, son seres vivos que invitan a vivir al espectador en su
mundo y le hacen sentir cómplice de la escena que relatan. Los edificios
en movimiento no son empujados por el viento como árboles que se
aferran a la tierra con las manos de sus raíces para no ser llevados,
sino que, son ellos mismos los que inventan su propio movimiento para
protagonizar la escena que se ha plasmado de su propia vida, es decir,
se sienten actores en un escenario en el que viven y marcan su realidad.
Figuras, geometrías cúbicas, colores y una leve caricia de surrealismo
hay en las escenas producidas por el ingenio de la mente inquieta de
Palmeral que, apagando su consciencia, deja fluir las emociones que
nacen directamente del mundo que emana de las sensaciones que sus
sentidos han ido alimentando en su interior.
Palmeral ha presentado
hoy, día 1 de septiembre, en el Centro de Arte de la Asociación de
Artistas Alicantinos, junto a la pintora y escritora Elena Sáinz, ante
la presencia de un grupo muy nutrido de pintores y artistas que llenaban
la sala, una colección muy interesante de lienzos que solo dejará
indiferente al espectador insensible.
Juan Antonio Urbano Cardona